11M, un año y un día
Hace un año y un día me levante diciendo que no merecía la pena ver los informativos de la mañana. Que saldrían las mismas noticias de siempre y aproveché para mirar un reportaje en la Autonómica (a esa hora temprana no trabajan sus informativos...) sobre Senderismo, creo que era sobre Masca.
Casi llegando al trabajo me entero de la gran tragedia y empecé a hablar sobre quién podría haber sido. Aunque el terrorismo es algo horrible, esperaba que en ETA existiera una pizca de sensatez para evitar matar cientos de personas. Sea 1 ó 1000 las víctimas, cualquier desgracia humana, fallecimiento o dolor hacen que estas actuaciones sean abyectas. Cualquier persona/entidad que les apoye o consienta su actividad merece todo el peso de la Ley. La elección de ese día y nuestro país parece claro, las consecuencias, no tanto.
Desgraciadamente, y ojalá no tenga que hacerse de nuevo, eldia.es actualizó por segunda vez en su historia la portada por una noticia de entidad. La vez anterior, fue el 11 de septiembre.
Al visitar Madrid el pasado año quice hacer mi pequeño homenaje personal y fruto de ese sentido homenaje me saqué una foto que llevo colgando en esta bitácora, muy cerca de dónde se produjo la tragedia. Es mi recuerdo de algo que no tuvo que pasar
Parece una condena y lo es. Un año y un día de recuerdos en el que hemos visto como un pueblo se volcó con aquellos que necesitaban hablar, como se produjo una manifestación en todo el país al son de un PÁSALO de ceros y unos. El despertar, independientemente del sentido ideológico, de una consciencia de pueblo global gracias a la tecnología. La consciencia de que somos una especie, más allá del lugar de nacimiento o condición social. Tan sólo hacía falta tener un móvil.
Ojalá otros avances como la vacuna contra el cáncer, el contacto con otra civilización, la eliminación del hambre entre nuestros semejantes sirva alguna vez para crear esas manifestaciones. Aunque, visto el resultado de la comisión, me temo que sólo es eso, una esperanza.
Casi llegando al trabajo me entero de la gran tragedia y empecé a hablar sobre quién podría haber sido. Aunque el terrorismo es algo horrible, esperaba que en ETA existiera una pizca de sensatez para evitar matar cientos de personas. Sea 1 ó 1000 las víctimas, cualquier desgracia humana, fallecimiento o dolor hacen que estas actuaciones sean abyectas. Cualquier persona/entidad que les apoye o consienta su actividad merece todo el peso de la Ley. La elección de ese día y nuestro país parece claro, las consecuencias, no tanto.
Desgraciadamente, y ojalá no tenga que hacerse de nuevo, eldia.es actualizó por segunda vez en su historia la portada por una noticia de entidad. La vez anterior, fue el 11 de septiembre.
Al visitar Madrid el pasado año quice hacer mi pequeño homenaje personal y fruto de ese sentido homenaje me saqué una foto que llevo colgando en esta bitácora, muy cerca de dónde se produjo la tragedia. Es mi recuerdo de algo que no tuvo que pasar
Parece una condena y lo es. Un año y un día de recuerdos en el que hemos visto como un pueblo se volcó con aquellos que necesitaban hablar, como se produjo una manifestación en todo el país al son de un PÁSALO de ceros y unos. El despertar, independientemente del sentido ideológico, de una consciencia de pueblo global gracias a la tecnología. La consciencia de que somos una especie, más allá del lugar de nacimiento o condición social. Tan sólo hacía falta tener un móvil.
Ojalá otros avances como la vacuna contra el cáncer, el contacto con otra civilización, la eliminación del hambre entre nuestros semejantes sirva alguna vez para crear esas manifestaciones. Aunque, visto el resultado de la comisión, me temo que sólo es eso, una esperanza.
